SINUSITIS
¿Cuidas un catarro?
Se define sinusitis como la inflamación de uno o más senos paranasales que ocurre habitualmente como complicación de una infección de vías respiratorias superiores, ya sea viral, bacteriana, por hongos, o a una reacción alérgica. Cuando la duración del cuadro es superior a diez días, se presupone sobreinfección bacteriana.
Los senos paranasales son unos espacios llenos de aire situados entre los huesos de la cabeza. Se comunican con la cavidad nasal a través de unos pequeños orificios, están revestidos de células que elaboran moco que se drena en la nariz, para impedir que se seque durante la respiración, para mantenerla húmeda y libre de polvo y microbios, llevan el nombre de los huesos que los contienen: frontales (parte inferior de la frente), maxilares (maxilar superior), etmoidales (etmoides, en la parte superior de la nariz) y esfenoidales (esfenoides, detrás de la nariz).
La sinusitis se clasifica como aguda, se resuelve totalmente en menos de 30 días, subaguda en 30 a 90 días, recidivante ≥ 4 episodios agudos separados en un año, en los que cada uno se resuelve totalmente y crónica que dura más de 90 días.
Los factores de riesgo comunes para la sinusitis incluyen factores que obstruyen el drenaje normal del seno paranasal, como rinitis alérgica, pólipos nasales, tubos nasogástricos o nasotraqueales; e inmunocompromiso, como diabetes, SIDA, quemaduras graves.
La sinusitis aguda y la crónica causan signos y síntomas similares, que incluyen rinorrea purulenta, presión y dolor en la cara, congestión y obstrucción nasal, hiposmia (pérdida parcial del olfato), halitosis (mal aliento) y tos productiva (en especial por la noche), a veces cefalea y/o fiebre. El dolor suele ser más intenso en la sinusitis aguda. La zona ubicada sobre el seno afectado puede estar dolorosa a la presión, hinchada y eritematosa.
La principal complicación de la sinusitis es la diseminación local de la infección bacteriana, causando celulitis periorbitaria u orbitaria, trombosis del seno cavernoso, o absceso epidural o cerebral.
En la gran mayoría de los casos el diagnóstico es exclusivamente clínico.
El tratamiento incluye inhalación de vapor y vasoconstrictores tópicos y/o sistémicos, en caso de infección bacteriana antibióticos. Los descongestivos, aerosoles nasales con corticoides y la aplicación de calor y humedad, pueden aliviar los síntomas y mejorar el drenaje de los senos. Para la sinusitis recidivante puede ser necesaria la cirugía.
Arturo Rangel Bojorges Mendoza
Consejero Suplente ante el H. Consejo Técnico del IMSS.
Fuente: MANUAL MSD